Iluso él, perdió la fuente de su poder sobrehumano, la peluca. Dalila un día la cambió por un cartón de cigarros, y así llego a nuestras manos, previa coima de ley. Yo (aka El Tunche) y mi hermano gemelo de distinta madre y padre (aka El Minotauro), contamos con la pelucadesansón, la cual nos adjudica el poder y derecho divino de criticar, joder y pastrulear a quemarropa. Tú! ven y hazte acreedor de alguna mecha de la peluca, poder infinito de opinar y divagar libremente. NO LO LEASSSSS

24.10.09

El misterio del ladrillo rojo

Una mañana desperté, salí a la calle y empecé a caminar. Inmediatamente noté la diferencia. En las esquinas, la tradicional vereda de cemento había desaparecido. Esa vereda dividida en metros cuadrados, con marcas de amor en el cemento fresco, desgastada por el andar, manchada con la grasa de alguna bicicleta vieja y pegajosa gracias a la goma de los arboles. Había sido reemplazada por un misterioso tramado de ladrillos rojos. El motivo escapaba a mi lógica. Podía ensayar alguna explicación, pero nada me llevaba a una respuesta certera. Metros más allá veo que partes de la pista sufrieron la misma suerte. Sigo sin entender. Tal vez las llantas de los carros se desgastan menos, tal vez nuestra columna sufre menos al caminar, pero el uso terapéutico del ladrillo rojo no me termina de convencer. En el transcurso del día recorro algunos distritos, y veo que la misma práctica se está llevando a cabo. Coincidencia. Ahora sí comienzo a esbozar una teoría un poco más cercana a la realidad. No es común que 4 alcaldes diferentes decidan usar la misma técnica. Algo huele feo. Miles, hasta millones de ladrillos utilizados inútilmente en remplazar una vereda o una pista. ¿Una forma de realzar el ornato de la ciudad? Si es así, bien aburrido, enladrillar el distrito para que se vea bonito. Pero claro, a un año de las elecciones tengo que mostrarles a los vecinos que hago obras, no importa qué obras, que vean el distrito lleno de carteles y pancartas de hombres trabajando. Por más inútiles e inservibles que sean están obras la gente dirá: el alcalde trabaja. Pero bueno esa será la gente que no se detiene a pensar un segundo para que chucha está haciendo eso, y creo q son pocos, el tema que es bien difícil levantar la voz y hacerse respetar con estos Bürgermeister. En este país los alcaldes se creen dueños de la verdad y de la ciudad. Todo lo hacen a medias. Nos entretienen con unas piletas multicolor mientras los cráteres abundan en las pistas (¿Han pasado últimamente por la Av. Aramburú entre la PIP y República de Panamá?). Le hacen un zanjón al Zanjón (ya lleva un par de años allí y no pasa nada) vendiéndonos la idea que van a solucionar el transporte de Lima cuando no es del todo cierto. Y es que en realidad no les interesa ordenar el tema de las combis porque no es políticamente rentable para las elecciones venideras (nadie quiere meterse con los transportistas, que sigan haciendo de las suyas, normal, matando, contaminando, cotizando, tranquilo). Ni que decir del tren eléctrico que adorna la ciudad. La costa verde también la están empapelando con ladrillos rojos (¿Es una decisión de La Autoridad del Proyecto Costa Verde? Si es así, son una reverendas basuras.) Ya comenzaron a construir varios kilómetros de malecón con esta misma técnica. Además de que se les ocurrió la genial idea de poner bancas y un mini gimnasio (barras y abdominales) cada tanto, y obvio con su farolito más. ¿Dónde había visto eso? a sí claro, en la época de las cavernas, cuando la arquitectura no existía. Me temo que esto ha sido un acto desesperado de algunos alcaldes improvisados y que no forma parte de un proyecto integral que resuelva el diamante en bruto que es la Costa Verde. Creo que si esta parte del litoral limeño se trabaja bien, con plan maestro, una estética acorde a nuestro tiempo y dos dedos de frente, Lima podría transformarse en una especie de Barcelona del Pacifico, y no creo estar exagerando. Pero en vez de eso, acá prefieren poner unos ladrillos en el piso, unos fierros horizontales para que la gente haga ejercicios, y listo, que buen alcalde que soy, me voy a mi casa a jugar con mi perro. Solamente es necesario tomarse un avión con algunos asesores a cualquier ciudad europea. Caminar un rato, utilizar el transporte urbano, tomarse un café en una plazuela y copiarse todas las ideas posibles para aplicarlas en su comuna. Si quieres más cerca, Buenos Aires o Santiago, da igual, la pólvora ya esta inventada. ¿Tan difícil es hacer las cosas medianamente bien?

Finalmente, esta es mi teoría: Algún astuto empresario, productor de ladrillos rojos, creyó necesario re-decorar la ciudad y “convenció” a cuanto alcalde pudo, que la mejor manera de hacerlo era con su bendito producto.

Mi mensaje a los alcaldes, y que se lo metan bien en la cabeza o donde mejor les quepa: Para tener un periodo rentable sentados en el sillón municipal, no es necesario tener mal gusto y joderle la vida a los vecinos. Todos sabemos que al electorado no le importa que las autoridades roben siempre y cundo hagan obras. Y que mejor manera de llenarse los bolsillos que haciendo obras. Es el matrimonio perfecto. Es el negocio perfecto. Además los ojos están puestos en los congresistas, en los ministros o en el entorno presidencial. Si no son tontos, la hacen linda, pasan piola, nadie los va a demandar, los vecinos los van a adorar (reelegir las veces que quieran) y aun así pueden hacer que su distrito sea de la puta madre.

Memorable talada de arboles para poner cemento (o quien sabe más ladrillos rojos)
*Carlincatura, tan genial como siempre.

6 comentarios:

Luciano dijo...

Imposible estar más de acuerdo contigo, Minotauro. La falta de estética, urbanismo y criterio en esta ciudad (y creo que en todo el país) es ya algo hasta grosero. Pero depende de nosotros dejar de reelegir bestias y buscar gente realmente capaz para esos cargos. O hacer como en Barranco, donde los vecinos se están organizando y trabajando x sí mismos para mejorar algunas cosas.

Sebastian dijo...

Estos alcalditos que elegimos!
Como tu dices Mino, es el mejor negocio. Nadie los fiscaliza, nadie los jode y con sus obritas sacan rico billete.

Y no habia pensado el tema de los famosos ladrillitos en las pistas.
Que amarre tendran con las ladrilleras no?? no quiero decir COIMAS porque suena fuerte .

Gargamel dijo...

Al paredon!! esos malditos como los odio !!! (Casi mas que a los pitufos!)

ladrillero dijo...

- Segun un Ingeniero, estos ladrilletes ademas de decorar, son de facil reposicion (esto se convierte en negocio igual, pero es mas rapido yno requiere una obra de ingenieria civil para repavomentar la pista o vereda respectiva).
- De todas maneras es un negociado con los 2 fabricantes peruanos de estos ladrilletes.
- 100% de acuerdo que podriamos ser la barcelona del pacifico pero aqui muy dificil que trabaje en ese rumbo.
- Interesante punto de vista que los alcaldes la hacen caleta. Caso ejemplar el del payaso de magdalena que teniendo 90% de aprobacion vecinal, le lustro las pelotas a Alan Garcia y este lo metio de Ministro y por su afan de protagonismo se JODIO!!! ahora le destaparon sus cochinadas, se quedo sin mamadera en el municipio y la carrera politica al tacho! GRACIAS POR PARTICIPAR PELOTUDO!

Sebastian dijo...

Ladrillero ese es floro nomas. La verdad de las cosas es que de hecho hay un entripado bien jugoso con ese negocio de los ladrilletes esos.
Que cochinadita habra??
Ay mamita yo quiero ser alcalde.

Anónimo dijo...

- Pepito, pepito, qué quieres ser de grande??...

- Alcalde señorita...

(Respuesta de los niños peruanos viendo el jugoso porvenir que les espera)