Iluso él, perdió la fuente de su poder sobrehumano, la peluca. Dalila un día la cambió por un cartón de cigarros, y así llego a nuestras manos, previa coima de ley. Yo (aka El Tunche) y mi hermano gemelo de distinta madre y padre (aka El Minotauro), contamos con la pelucadesansón, la cual nos adjudica el poder y derecho divino de criticar, joder y pastrulear a quemarropa. Tú! ven y hazte acreedor de alguna mecha de la peluca, poder infinito de opinar y divagar libremente. NO LO LEASSSSS

11.5.11

Kolluntura

El Tunche me dice: - “Oe Mino, coyuntura, coyuntura”. Lo miro, y sin hablar, le pregunto de qué me habla. - “Un tema de coyuntura, no sabes cómo levanta la audiencia de la peluca, con mis últimos posts políticos la gente se ha calentado”. Tal vez estoy cometiendo una infidencia y espero no altere nuestra audiencia, pero el comentario del Tunche se quedó dando vueltas en mi cabeza. Para empezar, hace un mes (desde el 11 de abril) que no leo periódicos ni veo noticieros ni escucho RPP ni Radio Capital. Si paso por un kiosco me tapo un ojo y sólo leo las portadas de los periódicos deportivos. De que coyuntura puedo escribir, si no estoy informado de nada. Por otro lado, que atractivo tiene esto de tertuliar sobre los temas que están sobre el tapete, porqué moviliza tanto a las personas? No tengo una respuesta, pero por supuesto la gente que entiende de moda y probablemente los de Apple tengan muy claro este fenómeno.

Yo prefiero pensar en un mundo más personalizado, creando mi propio microcosmos y en cierta forma aislándome conscientemente. Siendo selectivo con la información que quiero obtener, con las personas que me quiero rodear (no puedes evitar que la gente te comience a hablar de política) y de mis propios intereses. Sin pensarlo mucho, el último mes ha sido para mí un buen experimento, me he sentido en algunas ocasiones un granjero de Peru Nebraska, desconectado del mundo en común, escuchando noticias con semanas de atraso, algunas que ya lo dejaron de ser y otras q por supuesto lo siguen siendo. Pero por otra parte me he sentido muy bien, más relajado, menos angustiado y más conectado conmigo mismo y con mi propia realidad. Cuando me dicen: -“Pero tienes que estar informado, tienes que saber qué pasa en el mundo, tienes que conectarte con la realidad”-, yo me pregunto: - ¿Qué realidad? La realidad que los demás quieren que yo tenga, el miedo, la angustia, la incertidumbre, la alegría por la muerte de un maldito, la emoción por la boda de una inglesa, la incertidumbre por un pobre muchacho desaparecido. ¿Esa es la realidad que yo quiero? Yo quiero tener mi propia realidad. Ser el director de mi propio noticiero. Ya lo he parafraseado a Borges anteriormente cuando sostiene que sus relatos son un reflejo de la realidad, o mejor dicho de su realidad, que finalmente es lo mismo.

No puedo negar que me pica el ojo para leer las portadas de todos los periódicos, o que de veces en cuando lo leo al periodista más odiado del medio (y no me refiero a Hildebrandt) o que gorreé un rato la sección Luces del domingo. Pero en todo caso estoy haciendo una selección bastante personal y no me estoy atragantando con las hordas mediáticas en el desayuno.

Los medios están controlados por grupos de interés que quieren que nos enteremos de lo que a ellos les conviene que nos enteremos, o generarnos las emociones que ellos necesitan para que actuemos en masa como hormigas en función de sus intereses supremos.

Yo no sé si esto sea un tema de coyuntura, y tal vez baje la audiencia de la peluca, pero en todo caso, esté es mi coyuntura.

“Como siempre lo urgente no deja tiempo para lo importante”- Gracias Mafalda por regalarme una de las frases más geniales de la historia.


4 comentarios:

El Tunche dijo...

¡Como me vendes carajo!

Bueno, todo sea por vender... jajaja

El Tunche dijo...

Por las huevas estudiste publicidad!!

El Tunche dijo...

Como me vendes Mino! Los trapitos se lavan en casa, jajaja

Por las huevas estudiaste publicidad no?!!

Zeta dijo...

Minotaurus: un par de títulos para ti:
Abre los ojos
Atrevete
Bienvenido a la Vida
...
aunque la verdad, te admiro, bien por ti, ya quisiera poder decirle a la chica y media que vive junto a mí que que no consuma la porquería de la multimedia peruana QUE ME APLASTA.
pero esa batalla la tengo perdida.